La Cámara de Mafra decidió hoy por unanimidad dar por terminado el contrato de concesión de baja suministro de agua y tratamiento de aguas residuales con la compañía de ser agua, asumiendo el municipio el servicio.
La decisión se basa en una solicitud de aumento de las tarifas en un 35% de agua y saneamiento por parte del concesionario, con el objetivo de equilibrio económico y financiero, justificó dijo que el municipio en un comunicado.
Teniendo en cuenta “inaceptable” el aumento de las tarifas, el municipio hizo un estudio de viabilidad económica, financiera y jurídica de la concesión.
Analizado los pros y los contras, el municipio decidió, por unanimidad, por el término de la concesión, “un interés público legítimo y después de una quinta parte del periodo de la concesión, mediante un preaviso de al menos un año de antelación.”
En el estudio, la Lusa tuvo acceso, el Consejo concluyó que el equilibrio económico y financiero del agua Sé forzar la cámara para aumentar la tarifa en promedio 3% por año para el año 2020, lo que refleja el aumento de la factura a pagar por los habitantes de la comarca .
Por el contrario, la reversión de la concesión y la asunción del servicio por parte del municipio permitirán una reducción del 5% en los precios y, por tanto, una reducción en la fabricación de los consumidores domésticos.
Mientras se mantiene el servicio de agua Sé significaría un aumento en el gasto de alrededor de 2,6 millones de euros al año, el funcionamiento del sistema por la cámara implicará un costo anual de alrededor de 2,3 millones de euros.
La terminación del contrato de concesión puede implicar el gasto ayuntamiento de 11,6 millones de euros.
Con este fin, debe un préstamo de 30 millones de euros a 15 años para compensar al concesionario e invertir más en la renovación y ampliación de agua municipal y el saneamiento, valorado en unos 13 millones de euros.
En la reunión a puerta cerrada, a puerta cerrada, la propuesta fue aprobada por unanimidad por la mayoría PSD y el PS, ya que la CDU estaba ausente.
El concejal de la sustitución de la PS Renato Alves dos Santos fue favorable a la decisión, señalando que los socialistas lo largo de los años, siempre advirtió que el premio era “perjudicial para la población” no sólo los costos involucrados, sino también por no invertir la renovación de la red de aguas residuales.
También considera beneficioso que la asunción del servicio por la cámara permite reducir los aranceles en un 5% de los habitantes del municipio y que, aunque la ciudad tiene que recurrir a la banca, “no está en riesgo su salud financiera.”
La cámara también aclaró que todos los trabajadores de servicios públicos serán transferidos a la futura entidad de gestión del servicio, para ser creados por la cámara, con 100% capital.
El suministro de alta refiere a la recogida, tratamiento y suministro de agua a los embalses de los municipios, mientras que el suministro de baja equivalente al depósito red de distribución de agua para el consumidor final.
Escuchado por TSF, el Presidente de la Unión de Trabajadores del Gobierno Local (STAL) admite que no estaban a la espera de esta decisión es muy importante y simbólico.
José Correia explica que desde hace décadas que los sindicatos van a advertir de los efectos negativos de la privatización de un bien esencial como el agua.
Hace tres años, la empresa tenía la concesión de aguas en Mafra fue comprado por la compañía más grande de China en el sector.
El sindicato considera que este retorno a manos públicas puede ser el primero de varios.